Ayer sábado salimos de pesca un rato aunque la predicción de la mar era ola muy escasa en la web de “El tiempo” marcaba medio metro, aunque cuando llegamos al pesquero yo creo que ni llegaba.
Fuimos a pescar Reyes y yo, ya que Cheche por un problema de salud, y Fermintxo tenía que hacer algunas gestiones, pues no pudieron venir, así que Reyes me vino a recoger a las siete y cuarto y para las siete y media ya estábamos en el sitio, nada más empezar a bajar al pesquero, subía un pescador que había estado desde la madrugada vareando a la lubina, y estuvimos hablando un rato, nos comento que la mar estaba flojísima y que se veía venir el vinilo a distancia, nos dijo también que no estaba la mar ni siquiera para los sargos, pero bueno ya que estábamos bajamos a una punta que hace unos canales y que siempre tiene un poco de espumero, al llegar había otro pescador que estaba recogiendo la caña y que también andaba tentando a las lobas, era el hermano de Baldo, un afamado pescador de lubinas y nos dijo lo mismo, así que como yo llevaba la caña de spinning y la de sargos, pues empecé a varear un buen rato con el resultado igual que los otros dos que lo habían estado intentando antes que yo, un bolo como una casa, Reyes mientras tanto estaba dedicado por completo a la pesca del sargo, el resultado muy pobre solamente había pescado uno, estuvimos intentándolo hasta que bajó la marea y pudimos pasar a unas piedras delanteras, una vez colocados en el nuevo pesquero cambio la dirección del viento y la mar se empezó a mover de tal manera que hasta inclusive, tuvimos bastante problemas para pescar, ya que las olas nos mojaron unas cuantas veces, el bote de macizo me lo tiró para atrás y el recipiente con las gambas desparramado por las rocas, en fin es que ese pesquero tiene muy poca altura y a nada que la mar se levante un poco te barre literalmente, así que como la cosa se ponía fea dimos por concluida la pesca, el resultado fue pobre, pero disfrutamos de la mañana.
Abajo os pongo lo que pescamos y como se puso la mar al final .
En las quedadas que eran muy cortas.
Las primeras embestidas
En esta foto se aprecia cómo se levantaba la ola
Esta son las que sacamos
Inmortalizando a Reyes con la pesca y con el pelo mojado, y gracias al pantalón de agua que le salvó de calarse hasta arriba.
Y yo, recién calado por una ola, pero sin pantalón de agua y mojado entero jejeje.
La profundidad de pesca osciló bastante, ya que pescamos bastante fuera y hay mucho calado, así que metimos 3,5 m aproximadamente, y posteriormente pescamos pegados a la piedra y anduvimos entre 1,5 y 2 m de profundidad, la sócala tanto Reyes como Yo del 0´22 de diámetro, de carnada gamba roja y mejillón.
Bueno compañeros hasta la próxima salida, un saludo de los jubíletas.
